Bazza McKenzie, narcotraficante en Portsmouth Inglaterra, vive sus peores momentos. Tras años dedicado al negocio de la cocaína y la heroína, la policía anda tras él. Actualmente, McKenzie aparece haber ido derecho, pero los policías no lo creen; es por esto que la labor de los detectives Joe Faraday y sus contraparte Paul Winter se complicará cuando uno de ellos sea acusado de proporcionar droga a un adicto que murió de sobredosis.